¿Qué es la L-prolina?

La L-prolina es un aminoácido. Los aminoácidos son moléculas que, al unirse en cadenas, forman las proteínas del organismo. Por lo tanto, los aminoácidos son similares a las letras de un alfabeto que se utilizan para formar palabras. El número específico y la secuencia de aminoácidos determinan la forma y la función de la proteína. Las proteínas se utilizan en todo tipo de funciones en el organismo, incluidas las que participan en la estructura de los tejidos y la regulación celular. 

El cuerpo humano utiliza veinte aminoácidos distintos para su buen funcionamiento. Nueve de estos aminoácidos se denominan aminoácidos esenciales y deben consumirse a través de la alimentación. La L-prolina y otros diez aminoácidos pueden formarse en el organismo y se denominan aminoácidos no esenciales.  Sin embargo, el suministro de aminoácidos no esenciales como la L-prolina puede suponer un apoyo importante en momentos de mayor necesidad.

¿Qué hace la L-prolina?

La L-prolina se aisló a partir de la gelatina en 1901. Su nombre deriva de la palabra griega "prolos", que significa «antes del pegamento» y alude a su naturaleza pegajosa. Se utiliza en el organismo principalmente para formar colágeno, cuyo nombre también procede de la palabra griega que significa pegamento. El colágeno, junto con el ácido hialurónico (un mucopolisacárido pegajoso) y la elastina, forma la sustancia básica o "cemento intracelular" que mantiene unidas entre sí las células del organismo.

Beneficios para la piel

La L-prolina es sumamente importante para la salud, ya que el colágeno representa el 30 % de todas las proteínas corporales y hasta el 70 % de las proteínas de nuestra piel y tejidos conectivos, como tendones, ligamentos, cartílagos, huesos y vasos sanguíneos. 

El uso principal de los suplementos de L-prolina refleja los usos de los péptidos de colágeno. En concreto, la L-prolina puede ayudar a favorecer la síntesis de colágeno para mantener la salud de los tejidos con un alto contenido de colágeno, como las articulaciones y la piel1. La L-prolina también podría ayudar a favorecer la cicatrización de heridas2. Durante las primeras fases de la cicatrización de heridas, los niveles de prolina aumentan en las zonas afectadas para favorecer la formación de nuevo colágeno y así ayudar a promover la cicatrización. La L-prolina también podría ayudar a mejorar la función de barrera intestinal y la función inmunitaria3

Alimentos con L-prolina

La L-prolina está presente en alimentos o suplementos ricos en colágeno. Entre las fuentes de origen animal se encuentran la carne, el caldo de huesos, la gelatina, los productos lácteos y los huevos. Las legumbres, la soya y los frutos secos son buenas fuentes vegetales. 

Dosis de L-prolina

Una dieta normal aporta normalmente unos 5 gramos de L-prolina al día. Para aumentar la ingesta de L-prolina, se puede incrementar el consumo de alimentos ricos en L-prolina. Por lo general, la administración de suplementos de L-prolina se recomienda en dosis de 500 mg dos o tres veces al día.

Referencias:

  1. Murakami H, Shimbo K, Inoue Y, et al. Importance of amino acid composition to improve skin collagen protein synthesis rates in UV-irradiated mice. Amino Acids. Junio de 2012;42(6):2481-9. 
  2. Barbul A. Proline precursors to sustain Mammalian collagen synthesis. J Nutr. Octubre de 2008;138(10):2021S-2024S. 
  3. Ruth MR, Field CJ. The immune modifying effects of amino acids on gut-associated lymphoid tissue. J Anim Sci Biotechnol. Julio 30 de 2013;4(1):27.