La producción y secreción de ácido clorhídrico (HCL) por parte del estómago es fundamental para el proceso digestivo. También es uno de los principales mecanismos para evitar que las bacterias, virus, levadura y otros organismos no deseados ingresen al cuerpo.

Algunas veces, por una serie de diversos motivos, una persona podría no secretar una cantidad adecuada de ácido clorhídrico. Por ejemplo, el envejecimiento es un gran factor, ya que cerca de cuatro de cada diez personas de más de 40 años presentan algún grado de deficiencia en la secreción de ácido gástrico1. De hecho, la falta de secreción de HCL en el estómago es una de las causas más comunes de indigestión, distensión abdominal o eructos luego de una comida, además de la malabsorción de nutrientes.

El uso de suplementos con betaína HCL en las comidas puede compensar ese déficit y contribuir en gran medida a mejorar la indigestión cuando existe una escasa producción de ácido gástrico. 

¿Qué es la betaína?

La betaína es un miembro no oficial de la familia de las vitaminas B. Técnicamente, no es una vitamina porque el organismo puede producir betaína. Aún así, esta trabaja en estrecha relación con otras vitaminas B en varias funciones corporales, como la función hepática, la replicación celular y los procesos bioquímicos2. El uso de suplementos con betaína está aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) para tratar el trastorno genético del metabolismo de la homocisteína. 

Un beneficio gastrointestinal clave de la betaína es que mejora la salud del revestimiento intestinal2. En concreto, la betaína ayuda a preservar y reforzar la función de barrera de las células que recubren el intestino para combatir el "intestino poroso". La betaína mejora la barrera intestinal incrementando la producción de proteínas que mantienen la estrecha unión entre las células.

Fuentes alimenticias de betaína

  • remolachas;
  • brócoli;
  • mariscos;
  • espinaca y otras verduras de hojas verdes; y
  • granos enteros.

¿Qué es la betaína HCL?

EL HCL es sumamente ácido. El HCL puro produciría un hoyo en su boca o garganta si tratara de consumirlo de forma libre. La betaína HCL es una forma segura tanto de betaína como de HCL para ser usada como suplemento. La betaína HCL brinda el ácido clorhídrico para el estómago, donde las células especializadas y los compuestos que lo recubren evitan que el ácido tan potente cause algún daño.

La importancia del HCL en el estómago

El estómago está diseñado para ser sumamente ácido cuando está vacío. Su pH va de 1.5 a 2.5. Cuando tiene que procesar alimentos, las células estomacales generan más HCL junto con una enzima que digiere proteínas llamada pepsina. Esta combinación es realmente importante para descomponer las proteínas consumidas y destruir los microorganismos ingeridos, como las bacterias, los virus y la levadura3

La secreción de una cantidad adecuada de HCL es necesaria para absorber de manera debida la vitamina B12, el folato, la vitamina C, el hierro y algunas formas de calcio, el magnesio y el zinc

¿Cómo saber si su estómago está secretando una cantidad adecuada de HCL?

Si bien hay pruebas especializadas que miden el pH estomacal, la insuficiencia de ácido gástrico de grado leve puede ser determinada mediante síntomas comunes. Las personas con baja producción de ácido gástrico, a menudo experimentan molestias casi al instante en que los alimentos llegan al estómago o poco después de consumir una comida. La indigestión a menudo se experimenta como una sensación de saciedad, distensión abdominal, eructos, náuseas o cólicos. Asimismo, dado que el HCL es fundamental para la digestión de proteínas y la asimilación de minerales, la baja producción del mismo a menudo es asociada con uñas débiles, que se pelan o se agrietan. 

Cómo usar suplementos con betaína HCL

Muy a menudo, los productos con betaína HCL también incluyen pepsina, una enzima que digiere proteínas o proteasa. La pepsina proviene de los estómagos de los cerdos o es brindada en forma de proteasas veganas con actividad similar a la pepsina. La dosis inicial de esta combinación de productos o betaína HCL es una cápsula que brinde 500 mg de betaína HCL con cada comida. 

Algunos médicos utilizan un desafío para adecuar la dosis a cada persona. Esto simplemente conlleva tomar un mayor número de cápsulas con cada comida subsecuente hasta que haya una sensación de calidez o malestar en el estómago. Cuando eso ocurra, regrese a la dosis usada con anterioridad. Esa es la dosis de mantenimiento para esa cantidad de comida. Para comidas más grandes, es recomendable que incremente el número de cápsulas en una. Para comidas más pequeñas, reduzca el número. 

  • Deberá tomar menos con las comidas más pequeñas. 
  • Cuando se van a tomar varias cápsulas, lo recomendable es tomarlas a lo largo de la comida. 
  • A medida que su estómago comienza a recobrar la capacidad de producir la cantidad de HCL necesaria para digerir de forma adecuada sus alimentos, notará una sensación cálida nuevamente y tendrá que reducir el nivel de la dosis.

Seguridad y efectos secundarios

Advertencia: no tome el HCL en ayunas. Consulte con un profesional de la salud antes de usar si sufre de úlcera péptica activa, si está embarazada o si está dando de lactar. Mantener fuera del alcance de los niños. 

Efectos secundarios: podría causar efectos secundarios gastrointestinales leves como náuseas y malestar estomacal.

Referencias:

  1. Howden CW, Hunt RH. Spontaneous hypochlorhydria in man: possible causes and consequences. Digestive Diseases 1986;4(1):26–32.
  2. Arumugam MK, Paal MC, Donohue TM Jr, et al. Beneficial Effects of Betaine: A Comprehensive Review. Biology (Basel). 2021 May 22;10(6):456. 
  3. Schubert ML. Functional anatomy and physiology of gastric secretion. Curr Opin Gastroenterol. 2015 Nov;31(6):479-85.